jueves, 28 de enero de 2021

EL CEREBRO NAVIDEÑO

 


Artículo correspondiente a la columna semanal DE LA CABEZA del Diario La Nación del sábado 26 de diciembre de 2020. Todos los derechos reservados.

Es Navidad de un año atípico, pero Navidad al fin. Y todos nos sentimos "especiales" en estas fechas: evaluaciones, nostalgias, necesidad de reencontrarnos (más que nunca este año), compartir, incluso permitirnos excesos alimentarios y de erogaciones en gastos para "regalarnos" en estos días. Y, como todo en la vida, es nada mas y nada menos que una construcción cerebral, no del corazón como siempre aclaro, aunque, claro, se diga que es así. 

Poseer o no espíritu navideño tiene su explicación científica. Estudios realizados por la Universidad de Copenhague en Dinamarca, y que involucraron el escaneado cerebral por medio de resonancia magnética funcional y PET-Scan, en el que se midieron los cambios producidos en la oxigenación y el flujo de la sangre en el cerebro en respuesta a la actividad de las neuronas, fijaron qué partes del cerebro estaban involucradas en lo que conocemos como espíritu de la Navidad. Así, los mapas resultantes revelaron que cinco áreas del cerebro eran las protagonistas de este sentimiento: la corteza motora primaria y la corteza premotora, el lóbulo parietal superior, el lóbulo parietal inferior y la corteza somatosensorial primaria, todas ellas localizaciones cerebrales relacionadas con los sentidos somáticos y la espiritualidad. Este hallazgo, más que anecdótico, puede contribuir a comprender la función del cerebro en las tradiciones y festividades culturales. Aunque en realidad algo tan mágico y complejo como el espíritu navideño no puede ser completamente explicado por la actividad cerebral detectada por si sola probablemente. 

Estas activaciones tienen su explicación. En estudios pasados, la activación de los lóbulos parietales se había vinculado con la autotrascendencia, que es una cualidad compleja que hace que nos sintamos parte de algo más grande y está relacionada con la espiritualidad. Sin embargo, por más avances que tengamos en las neuroimágenes, las emociones complejas todavía no son comprendidas del todo”

Aún es muy difícil determinar si esta red neuronal navideña es exclusiva de la Navidad o si es indicativa de las emociones que también experimentan las personas que celebran otras festividades, como Janucá, la Pascua o el Diwali. Sin embargo, aunque el estudio de Copenhague tuvo una muestra pequeña de participantes, es uno de los primeros que deliberadamente buscan una "impronta" navideña en el cerebro. Todavía falta mucha investigación para saber qué ocurre en muestras mentes durante las tradiciones navideñas, pero por ahora podemos saber que una amalgama de emociones, expectativas y áreas cerebrales están trabajando juntas para que la Navidad sea la época que más nos pone DE LA CABEZA y una de las más placenteras del año. Nos leemos el siguiente sábado. Feliz Navidad.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

LO QUE SUCEDE EN EL CEREBRO CUANDO DAMOS UNA BUENA CLASE

  Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación correspondiente al domingo 10 de setiembre de 2023. Todo...