jueves, 27 de octubre de 2022

PARÁLISIS DEL SABADO A LA NOCHE

 

Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación del domingo 30 de octubre de 2022. Todos los derechos reservados.

A veces pensamos "dormí mal" cuando despierto adolorido por las mañanas, sobre todo después de un "amanecer de una noche agitada". Pero ¿qué tal si a ese mal despertar, cefalea, letargo, boca pastosa y dolor de cuerpo, le sumamos una parálisis de uno de los brazos? Eso es lo que, en Medicina, y en un alarde de gracia no común en las denominaciones aburridas que tenemos los médicos para describir los sindromes (les ponemos los apellidos y demás), conocemos como "parálisis del sábado a la noche" o "saturday night palsy" en inglés. Esta se produce por compresión del plexo braquial (conjunto de troncos nerviosos que salen de la médula cervical y se dirigen hacia el brazo por la axila para inervarlo) en una postura que comprometa la funcionalidad del mismo; se puede producir por diversos mecanismos y pueden verse afectadas diferentes ramas nerviosas.

Para conocerlo, diremos que el nervio radial es una rama terminal del tronco posterior del plexo braquial. Es un nervio sensitivo-motor implicado fundamentalmente en la extensión del codo, muñeca y dedos y doblar el antebrazo, por lo que el signo más característico de parálisis del nervio radial es "la mano caída". Dado su largo trayecto puede lesionarse en varias localizaciones: a nivel alto en la axila, o en el canal de torsión donde va acompañado de la arteria humeral profunda y es muy vulnerable, o bien distalmente, en el codo donde se divide en dos ramas. 

La causa más frecuente de lesión es la compresión del nervio en la parte posterior del húmero, en el brazo. Los mecanismos de producción de las lesiones por compresión, o síndromes de atrapamiento, pueden ser de varios tipos y, refiriéndonos al plexo braquial y sus ramas, podemos considerar las siguientes situaciones: 

1) Parálisis del sueño: la cabeza del paciente dormido queda apoyada sobre el brazo o se comprime contra el húmero con el cuerpo de costado

2) Parálisis de la luna de miel: el brazo queda comprimido por el peso de la pareja acompañante. 

3) Parálisis de la muleta: el brazo se comprime apoyado sobre el respaldo de una silla o el borde de una mesa o una muleta. 

4) Lesiones por torniquete: el nervio se daña por efecto de un torniquete colocado demasiado ajustado o por tiempo muy prolongado. 

5) Parálisis postanestésicas: producidas por presión sostenida y prolongada sobre la cara externa del brazo durante una intervención. 

El nervio se lesiona por la falta de oxígeno debida a la compresión y al daño a nivel de la transmisión de impulsos que sucede a consecuencia de ello. Se suele resolver espontáneamente en unas 6-8 semanas. El tratamiento médico en los casos mas leves se basa en fisioterapia (fortalecimiento muscular, evitar contracturas), mientras que en los casos más avanzados se debe poner una férula para mantener en extensión la muñeca y fármacos. El pronóstico depende del grado de lesión, en los casos más leves es bueno y la recuperación espontánea es la regla; su seguimiento será clínico exclusivamente. En las lesiones más importantes hay que esperar al menos tres meses antes de decidir otras medidas más invasivas. Las complicaciones más frecuentes son: daño permanente del nervio con la consecuente pérdida total o parcial de movimientos o la sensibilidad de la muñeca y la mano, dolor crónico y atrofia muscular, generalmente irreversible, por denervación, a los 3 meses.

Como vemos, no es poca cosa "dormir mal". Podemos lamentarlo después. Si te dejo DE LA CABEZA esta afectación, espero tus comentarios al pie de la columna para saber que otros temas desearías tocar en otros domingos. Nos leemos en una semana.

jueves, 20 de octubre de 2022

LOS NOOTROPICOS: SUSTANCIAS PARA QUE EL CEREBRO RINDA MAS


Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación del domingo 23 de octubre de 2022. Todos los derechos reservados.

Un motivo clásico de consulta en mi consultorio es el caso de los pacientes que quieren "vitaminas para su cerebro" porque se sienten agotados, porque la rutina les sobrepasa, porque no rinden mentalmente como antes o porque sienten "que se olvidan de las cosas". Antes de hablarte de estos fármacos (los nootrópicos) voy a repetir la cantinela que me han leído en esta columna en varias ocasiones: la base de un buen rendimiento intelectual comienza con un buen sueño y con la reducción de los factores de riesgo cerebral (tabaquismo, dislipidemias, hiperglicemia, sedentarismo, etc.). Ya sé, más de lo mismo, pero es la "verdad verdadera". Dicho esto, pasemos al tema de este domingo en la columna.

De entrada ya te digo que no puedo decir que los nootrópicos sean una “píldora mágica” que con su sola toma, y de modo automático, amplificarán tu capacidad mental y mejorarán tu función cerebral. Las sustancias de las que voy a hablarte hoy, desafortunadamente, no pueden hacer eso por tu cerebro, pero lo que sí puedo garantizarte es que potenciaránn tu inteligencia... si van acompañados de la corrección de todos los factores que cité al comienzo. Estos suplementos nootroópicos nos ayudan a mejorar las habilidades cognitivas y la memoria. Y es que los fármacos y suplementos que se engloban bajo esta denominación, han supuesto un cambio de paradigma similar en el ámbito de las neurociencia y en la psicofarmacología. 

Lo primero que te interesa saber al respecto es que la definición del concepto de “nootrópicos” es tan abierta como su naturaleza y posible potencial. Es más, desde que el químico y psicólogo rumano Corneliu E. Giurgea acuñara por primera vez el término, en el año 1972, aquello que se entiende por nootrópico ha ido evolucionando hasta el punto de cobrar límites conceptuales difusos. Así, el término nootrópico se refiere a compuestos que se consumen para provocar en el cerebro un efecto determinado, mejorando y potenciando su rendimiento. Esto incluye, en el marco de su aplicación, el uso para actividades que precisen de una mejor capacidad cognitiva (estudio, trabajo de precisión), un uso en el ámbito del deporte que nos permita la mejora de la conexión mente-sistema muscular, teniendo como objetivo el propio uso deportivo (lo que justifica su incorporación en multitud de productos de pre-entrenamiento) o para una actividad de cualquier otra índole que requieran exigencia de capacidades neurocognitivas. Y eso es porque estas sustancias pretenden la agilización de la actividad cerebral y la amplificando la señalización neuronal. El uso de los nootrópicos es capaz de incrementar el riego sanguíneo hacia el cerebro, circunstancia que va a permitir un mejor suministro de glucosa, oxigenación y nutrientes. Esto será especialmente propicio para el desarrollo de un trabajo de modo efectivo y también cuando se necesite ejecutar tal labor por un período de tiempo prolongado. 

Conviene dejar claro que los nootrópicos no son drogas y ello pese a que es cierto que un grupo de ellos se conoce como “smart drugs” o “drogas inteligentes”, algo que no va más allá de una mera denominación, toda vez que no son sustancias adictivas y que sus efectos secundarios son mínimos. De hecho, algunos son nutrientes que puedes encontrar en distintos tipos de alimentos, como hierbas y/o plantas, del estilo de la lecitina, los granos de café o el Ginkgo biloba. La misma cafeína produce la sensación de agudeza mental, la sensación del retraso de fatiga y de poder realizar varias actividades al mismo tiempo. Igualmente, existen suplementos nootrópicos que no son fármacos. La diferencia entre los fármacos y los que no lo son es que los primeros están sujetos a receta médica y se venden en las farmacias, mientras que el resto no necesitan dichas recetas y se venden en establecimientos especializados en nutrición. 

Podría hablarte mucho más de como actúan pero vamos a lo que te interesa este domingo: ¿cuáles son?

Los nootrópicos indicados para mejorar el estado de ánimo son: el aceite de pescado (Omega-3) y el aminoácido triptófano. Los indicados para mejorar la concentración (uno de los ítems donde demuestran su mayor potencial) son la cafeína, la L-Tirosina y el ginseng. Para la ansiedad se indican la Teanina Ashwagandha y el GABA. Para la memoria, el otro efecto "estrella" de estos compuestos, usamos Ginkgo Biloba, la Fosfatidilserina y el Inositol. Para el descanso indicamos a la melatonina, el Zinc y el Magnesio. los nootrópicos con efectos de tipo "antiaging", mal llamados "rejuvenecedores" (más bien de mantenimiento de la integridad estructural pese al paso del tiempo) son el Ácido Alfa Lipoico, la Acetil L-Carnitina y el Extracto de Cúrcuma. Los usados para incrementar el rendimiento deportivo mediante un incremento en la concentración son el Alpha GPC, la Rhodiola Rosea y el DMAE (siglas de un grupo de nootrópicos). 

Es más que indispensable conocer a los nootrópicos, sobre todo para las personas que se dedican profesionalmente a ciertos sectores relacionados con la creatividad y con las nuevas tecnologías, o a ocupaciones demandantes de rendimiento cognitivo óptimo. Bien indicados por profesionales, estos productos DE LA CABEZA son pasos necesarios para llegar a disfrutar de las mieles del éxito. Nos leemos en una semana.

jueves, 13 de octubre de 2022

EL CEREBRO JUVENIL Y LA INTOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN

 

Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación del domingo 16 de octubre de 2022. Todos los derechos reservados.

Mi gran amigo Claudio, un prestigioso médico de Santa Cruz de la Sierra con quien comparto tertulias agradables vía Whatsapp y asiduo seguidor de esta columna, siempre tiene un tema interesante para sugerirme. Esta semana, hablando de nuestra común pasión de docentes, me lanzó la pregunta acerca de la frustración cada vez menor de los estudiantes hoy en día. Y, en homenaje a su solicitud, voy a desarrollar el tema,.

La frustración es un estado emocional que se desencadena ante acontecimientos que involucran la reducción o supresión inesperada de reforzadores primarios, como estímulos apetitivos y alimenticios, o secundarios como por ejemplo dinero, entretenimiento, estímulos sociales y lúdicos. El estado de frustración se puede generar por la omisión total de lo esperado, por la disminución de su calidad, la demora en su presentación, la interrupción en la frecuencia de aparición, así como también por la dificultad en la realización exitosa de pruebas con distintos grados de presión o exclusión social. Teóricamente, no reforzar aquello que se espera genera en el sujeto un estado interno aversivo denominado frustración primaria. Esta respuesta implica la primera reacción frente a la omisión de esa respuesta y puede vincularse con un proceso de estrés agudo. A su vez, los estímulos asociados con este estado adquieren la habilidad de provocar una expectativa condicionada de la frustración primaria denominada frustración secundaria. 

En relación a las emociones, permite pensar cómo el enfrentarse exitosamente a situaciones de pérdida o decepción tiene un rol adaptativo clave en la vida de todas las especies. Debido a que el ambiente es un elemento que se encuentra en un cambio constante, demanda al sujeto la necesidad de contar con mecanismos que le permitan buscar nuevos recursos y extinguir la respuesta hacia refuerzos de menor calidad. la conducta de frustración implica diversos procesos psicológicos, tales como aprendizaje, memoria, estilos de afrontamientos y personalidad, emociones, ansiedad y estrés. 

En relación al estrés, se sabe que en una fase de alarma o aguda, resulta ventajoso. Aparece cuando es visto como algo dañino, que puede generar una pérdida, como algo amenazante o desafiante. Así es que el valor que se le otorga a los hechos no es absoluto sino relativo, ya que los mismos son modulados por el aprendizaje previo y por nuestras bases genéticas y biológicas, al igual que ciertas patologías que influyen en la tolerancia y en la percepción de situaciones de decepciones. Es necesario entender que la conducta de frustración es un mecanismo complejo y que, por ejemplo, en los estudios con humanos se encuentran mediando otros factores como el lenguaje, la cultura, influencia de nuevas tecnologías y expresiones faciales que son propios de la especie. Evaluando de manera diferencial cada dimensión, encontró que la intolerancia emocional estaba significativamente relacionada con los problemas de procastinacion, lo que permite pensar que la decepción primaria es un factor principal que imposibilita que los sujetos desarrollen con éxito diversas tareas. 

Los adolescentes sienten frustración por muchas de las mismas razones que los adultos: presiones sociales, obligaciones, problemas de relación y confusión sobre el futuro. En los adolescentes, estos problemas a menudo se ven agravados por los cambios hormonales. Los adolescentes también pueden sentirse frustrados en su lucha por establecer una identidad y afirmar su independencia mientras siguen las reglas familiares y escolares. Además de estas fuentes comunes de frustración, como los adultos, los adolescentes pueden sentirse frustrados cuando están deprimidos, ansiosos o experimentan una discapacidad de aprendizaje, como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad. La frustración puede manifestarse de muchas maneras. Algunos adolescentes pueden volverse irritables y atacar a sus padres y maestros, mientras que otros se retirarán y realizarán esfuerzos mínimos para cumplir con sus obligaciones. Cuando son impulsados por el rechazo social o el fracaso, los adolescentes pueden cambiar sus hábitos de socialización o abandonar los deportes u otras actividades extracurriculares. Cuando la frustración causa un estrés intenso, los adolescentes pueden enfermarse con más frecuencia o informar dolores de estómago, dolores de cabeza u otras molestias físicas. 

Pero ¿qué hacemos en estos casos? Hablar con una adolescente sobre sus sentimientos puede ser un buen primer paso. Ayudarle a desarrollar un plan para administrar el tiempo puede ayudarle a reducir su frustración y ayudarle a encontrar el equilibrio entre las responsabilidades como la escuela, las actividades extracurriculares y las actividades sociales. Cuando el adolescente sufre una angustia extrema, como llorar con frecuencia, dormir en exceso o experimentar cambios en el apetito, sus sentimientos pueden estar más allá de los síntomas normales de estrés. En este caso podría tratarse de depresión u otros trastornos en las emociones o en la mente que debería tratarse con un profesional de la psicología o la psiquiatría lo antes posible. Además, si la frustración le impide desempeñarse en el estudio  o si pierde interés en actividades que antes le interesaban, considere hablar con su médico o un terapeuta profesional porque esos síntomas pueden indicar un problema emocional más grave que deberá ser abordado lo antes posible antes de que se agrave. La idea es no frustrarse, no quedar DE LA CABEZA y siempre pero siempre, acompañar. Nos leemos en una semana.

miércoles, 5 de octubre de 2022

EL CEREBRO ATLETA

 

Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación del domingo 9 de octubre de 2022. Todos los derechos reservados.

Todos hablan de esto. Los juegos ODESUR acapararon la atención de propios y extraños. Y, por fin, pudimos ver todos cuánto de esfuerzo implica a nuestros atletas el desarrollarse en sus diferentes disciplinas. Pero no todo es músculo en el entrenamiento de alta competencia. De hecho, el músculo es solo un componente de un todo, donde realmente lo que se trabaja es el cerebro. Y eso en cualquier disciplina, no las más obvias como el ajedrez. Hablamos de estrategia, cálculo, precisión, disciplina, esfuerzo, tolerancia al dolor, resistencia al cansancio... todas estas cualidades indispensables para obtener la tan preciada presea dorada. 

Manejar los nervios, la ansiedad y la presión es parte del entrenamiento para lograr un nivel profesional de alto rendimiento. Los deportistas de alto rendimiento trabajan de una manera integral todos los aspectos que tienen que ver con la competencia, no sólo la técnica y la táctica específica de su deporte. La fortaleza mental es donde realmente se nota la diferencia entre un deportista ganador y uno que no lo es. Para la concentración, factor indispensable para obtener resultados, se utilizan, por ejemplo, varias estrategias para entrenar la mente de los deportistas, que incluyen ejercicios de respiración, pensar sólo en el instante presente y aprender a centrar la mirada en un solo objetivo. Estos ejercicios se asemejan más a lo que sucede en un centro de meditación budista que en un gimnasio, pero que, a la larga, marcan toda la diferencia entre un atleta competitivo y uno que no lo es. Y es que es obvio: los deportistas que entrenan las habilidades mentales tienen más herramientas para enfrentar los momentos críticos y de alta tensión que se presentan en la competencia. Cuando se enfrentan atletas con habilidades similares en cuanto a la técnica, la táctica, la fuerza, velocidad y la resistencia, el resultado final está determinado por los factores psicológicos como la confianza, la concentración, la tolerancia al fracaso y la actitud ganadora. Y esto, como no, también se entrena. 

​‌​ Los deportistas que entrenan las habilidades mentales tienen más herramientas para enfrentar los momentos críticos y de alta tensión que se presentan en la competencia. En los últimos años, entrenadores y deportistas han tomado ese conocimiento sobre la importancia de la preparación psicológica de un atleta y lo han llevado un paso más allá. Se han aliado con científicos que les han permitido ver exactamente qué es lo que pasa con el cerebro de un deportista de alto rendimiento cuando está en competencia. La Universidad de Montreal, por ejemplo, ha creado mapas neurológicos tras monitorear el cerebro de varios deportistas olímpicos, para comparar sus resultados con los de personas que no practican deporte. A contramano con el estereotipo de que los atletas hablan bastante poco y, por ende, son para muchos poco inteligentes, resulta absolutamente falsa esta afirmación, ya que sabemos hoy que la mente de un atleta cuenta con cinco rasgos sobresalientes que han sido agrupados por un grupo de entrenadores norteamericanos que buscan desarrollar un entrenamiento cognitivo que ejercite el cerebro de los deportistas en estas áreas, de la mano de la psicología y la neurociencia. En primer lugar está la capacidad de tomar decisiones instantáneas que hace que, mientras nuestro pensamiento consciente opere a una velocidad lentísima, el cerebro de un jugador como Lionel Messi o Cristiano Ronaldo esté entrenado para tomar decisiones instantáneas basadas en reconocimiento de patrones e instinto. En segundo lugar, está la capacidad de reaccionar y anticipar resultados por la que los atletas tienen una capacidad aguda para reconocer indicios visuales que les permitan reaccionar ante sus competidores, y que explica por qué los jugadores profesionales de tenis pueden saber con poquísima información el tipo de lanzamiento que les hace el contrario y escoger la mejor estrategia de respuesta. En tercer lugar se encuentra el razonamiento espacial que hace que un jugador de básquetbol esté entrenado para entender planos tridimensionales complejos y moverse sobre ellos mientras ejecuta otras acciones como defenderse, hacer un pase o marcar el tiro de la victoria. En cuarto lugar tenemos a la concentración y manejo de emociones, como un ajedrecista en cada movimiento o un arquero en cada tiro al blanco. Por último, el cerebro de un atleta cuenta con una amplia área de visualización e imaginación que les permite mejorar su rendimiento en momentos cruciales de competencia. 

Universidades en China, Australia, Italia y Estados Unidos también se han interesado por la manera en que funciona el cerebro de los atletas y han encontrado que el entrenamiento constante de un deporte puede alterar la estructura del cerebro. En 2001, científicos chinos se propusieron estudiar la fisiología del cerebro de buzos profesionales y encontraron que su corteza cerebral era mucho más gruesa que la del resto de las personas, rasgo que agudiza su percepción de movimiento en la oscuridad. Este estudio resonó con un hallazgo de la Universidad de La Sapienza en Roma, donde compararon las ondas cerebrales de atletas cinturón negro de karate con las de algunos voluntarios. Los atletas emitieron ondas alfa más fuertes, lo que demostraba un estado de relajación más profundo que permitía una mayor concentración. Posteriormente, los científicos italianos compararon estos resultados con los cerebros de esgrimistas y golfistas y encontraron movimientos similares. 

Los cerebros de los deportistas de alto rendimiento tenían algo en común: reportaron mayor eficiencia a la hora de completar tareas que pedían coordinación motora, pues sus cerebros se demoraban menos tiempo en encontrar la mejor manera de hacerlo. Mucho se ha hablado de la fisiología de súper humano de grandes atletas con una envergadura física envidiable, pero casi nadie sabe que sus entrenamientos se centran principalmente en el aspecto psicológico, ejercitando muchos de los ejes que son necesarios al entrenar el cerebro de un atleta, desarrollando diferentes escenarios mentales que son fundamentales a la hora del entrenamiento, como una relajación total que los lleva a ensayar diferentes escenarios mentales por horas y horas, visualización de victorias, incluso estimular los diferentes sentidos que rodearán su sitio de competencia: oler el ambiente donde competirá, probar los sabores y escuchar los sonidos que le rodearán, pensando diferentes  obstáculos que podrían surgir y que le impedirían ganar. Y es que para los que hacen neurociencias del deporte, el mensaje es claro: si se puede imaginar un escenario mental lo suficientemente fuerte y visualizarse en él, el cerebro inmediatamente buscará las maneras de que esto suceda. Y esto no es metafísica ni es nada que venga de "El secreto" o cosas así: es neurociencia pura. Es estar completamente DE LA CABEZA para la alta competencia. Fuerza Paraguay...!!! Seamos de oro...!!!

LO QUE SUCEDE EN EL CEREBRO CUANDO DAMOS UNA BUENA CLASE

  Artículo correspondiente a la columna dominical DE LA CABEZA del Diario La Nación correspondiente al domingo 10 de setiembre de 2023. Todo...